lunes, 19 de mayo de 2025

Costureras en las fábricas de bolsas de arpillera



                                      
                                          Fábrica de bolsas en Villa rosas, Compañía industrial de bolsas. Archivo Ferrowhite FW-3633

EL MUNDO EN UNA BOLSA( (cosida)
Ahí están, aunque parezcan ocultas. Entre las casitas del Boulevard y también en El Guanaco, cientos y cientos de obreras día a día cortan, cosen y remiendan sin cesar. Vienen de los barrios cercanos a trabajar en las fábricas de bolsas de arpillera, utilizadas para almacenar los granos que salen a través del puerto de Ingeniero White.
En enormes galpones de madera y chapa, mujeres jóvenes y adultas trabajan vigiladas por capataces y jefes. Los cortes en las manos, los callos en los dedos, los dolores de espalda y los problemas respiratorios están a la orden del día. Pero también charlan a escondidas, se ayudan entre ellas para terminar las labores, salen a bailar a los carnavales del barrio, publican cartas en la prensa anarquista, reclaman en las huelgas y también, entre los hilos, las tijeras y el sonido incesante y ensordecedor de las Singer, se enamoran. Tras el polvillo y la pelusa que todo lo cubría, entre el frío de duros inviernos y el calor sofocante de veranos eternos, las “obreras de la aguja” tienen cientos de historias para contar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario